La investigadora del Conicet, Marina Stein, recomienda el uso de repelentes, ropa holgada y de colores claros. Asegura que si bien las especies que han irrumpido en los últimos días no transmiten enfermedades, esta época se corresponde con la mayor presencia de Aedes Aegytpi, con lo cual, es importante poner énfasis en la eliminación de los criaderos domiciliarios. Las fumigaciones indiscriminadas en zonas amplias «no son recomendables».
Ante la notable proliferación de mosquitos que se hace sentir en Resistencia desde hace al menos 10 días, la jefa del laboratorio de Entomología del Instituto de Medicina Regional, Marina Stein, explicó que «algunas especies aparecen de manera explosiva porque se crian en espacios verdes o en cualquier superficie con tierra húmeda que puedan: «Las hembras depositan los huevos en estos lugares y si son inundados, en 48 aparece el mosquito; si no es así los huevos pueden perdurar por un año», detalló.
La preocupación va más allá de la molestia que causan las picaduras cuando las personas intentan pasar un momento al aire libre en espacios verdes. En la región, el Dengue se ha transformado en una enfermedad endémica y su transmisión depende de una especie particular de estos insectos. Si bien estas apariciones explosivas y masivas no corresponden a los Aedes Aegypti, las alarmas se encienden cada vez que la presencia de mosquitos se hace más notable. En este aspecto particular, la investigadora del Conicet llevó tranquilidad al recordar que este tipo de apariciones abruptas aparecen, prácticamente todos los años. «Puede ocurrir que, en función de las precipitaciones que tengamos, haya más o menos mosquitos. Es decir, si tuvimos un año seco, puede que no tengamos registro, pero con las últimas precipitaciones vamos a tener bastantes», comentó.
Los predadores naturales de estos insectos son reptiles, anfibios o aves y, en las zonas urbanas, tienen menos presencia. De todas maneras, la especialista remarcó «la modificación ambiental no es tan determinante porque aún en estos espacios hay suelos irregulares que colectan agua y forman charcos». Para combatir a estas especies, fundamentalmente cuando se trata de los niños, lo ideal es recurrir a los repelentes y tener en cuenta que muchas de ellas no sólo actúan durante el día sino que además están activas por la noche. También es recomendable usar ropa holgada, para evitar que el mosquito llegue a la piel; y con colores claros, ya que estos insectos prefieren los oscuros.
Fumigaciones
Por otra parte, la titular del laboratorio de Entomología del IMR consideró que las fumigaciones indiscriminadas en zonas amplias «no son recomendables por varias razones: no se sabe qué es lo que se utiliza para fumigar y si esos productos son efectivos o no para estas especies de mosquitos».
Por otra parte, no se establece con rigurosidad si esos mismos productos que se utilizan para la fumigación no afectan también a los depredadores de los mosquitos. «En general, lo que se utiliza es un elemento específico para el Aedes y en momentos de epidemia, ese insecticida que se libera debe tocar al mosquito para ser efectivo», agregó. Por estas cuestiones, reiteró que «como no se sabe es qué insecticida están por liberar, con lo cual, recomendamos a los gobiernos mantener el pasto corto y la vegetación podada en los espacios públicos de manera que disminuyan los lugares donde ese pueden ocultar los mosquitos».
Dengue latente
Stein indicó que este tramo del año es el de mayor presencia de mosquitos, incluso del Aedes Aegypti, con lo cual es necesario poner énfasis en los cuidados y la prevención. En ese sentido, recordó que el año pasado, se registró en el país «la tercer gran epidemia de Dengue, con más de 56.000 casos, pero pasó desapercibida por la problemática de la COVID-19».
De todas maneras, aclaró que las especies que se crían en charcos (no el Aedes Aegipty) son de dos géneros: psorophora, que son de color negros oscuro, todavía no han sido implicados en la transmisión de algún virus. «Por ahora, la única molestia que vamos a tener es la picadura, porque algunas personas pueden ser más sensibles», explicó. En cuanto a los Aedes Aegypti la especialista recordó que es más simple de controlar ya que necesitan criaderos artificiales, esto es, cualquier recipiente artificial que pueda colectar agua.