Desde el Ministerio de Educación aseguran que las clases volverían en las localidades donde «no hay presencia activa del virus»

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La pandemia por el coronavirus modificó la forma de enseñanza en las escuelas que debió tornarse a la modalidad virtual y a distancia, lo que generó distintas situaciones en la provincia, y que continuará “hasta tanto acordemos hacer el retorno presencial”, señaló la ministra de Educación, Daniela Torrente, a Diario TAG.

“Estamos trabajando con todas las escuela de la provincia a través de un trayecto de formación que iniciamos hace unos días para ver en cada caso puntual cuáles son las condiciones en las cuales volveríamos en las distintas regiones educativas”, contó y detalló que “tenemos como tres instancias de planificación del retorno: por un lado, tenemos la jurisdicción que es la provincia de Chaco; por otro lado, tenemos 12 regiones educativas que a su vez tienen cuatro subregiones, o sea 16 espacios geográficos; y a su vez dentro de cada una de esas regiones y subregiones tenemos las escuelas de los distintos niveles”.

En este sentido, explicó que “lo que hicimos fue, primero, a nivel nacional definimos protocolos y recomendaciones pedagógicas en el marco del Consejo Federal de Educación y a eso lo trabajamos entre las 24 provincias. Como ministra soy representante de la provincia. Junto con el Ministerio de Salud de la Nación también armamos protocolos, mejor dicho se arma un Consejo de Planificación de lo que era toda la cuestión sanitaria y se armó el protocolo de retorno. Eso se aprobó en resoluciones del Consejo Federal que bajaron a la provincia”.

“En la provincia, en base a eso, empezamos a armar nuestro propio protocolo de higiene y de condiciones de vuelta en materia edilicia, en materia de seguridad, es decir todo lo que tiene que ver con la bioseguridad está reglado a nivel provincia. En este momento tenemos un protocolo ya definido, se lo estamos pasando al Ministerio de Salud para que dé el aval y va de vuelta a Nación para que nos aprueben. Eso es la parte de cómo volveríamos, en qué condiciones de higiene y demás”, indicó.

Además, “en materia de cuestiones pedagógicas y de selección de destinatarios a los cuales volveríamos, lo que estamos haciendo es, ya por región educativa y por escuela, trabajando los proyectos institucionales y los proyecto de cada institución educativa en función de distintas cuestiones. Por un lado estamos evaluando volver en aquellas localidades donde no tenemos presencia activa del virus. En principio queremos tener un retorno, aunque sea muy limitado, en el mes de septiembre, no a principios de septiembre, pero sí durante ese mes, todavía no está definido el día. Nuestra primera población serían los estudiantes de 5to año, 6to año en el caso de técnicas, porque como ellos cierran nuestro nivel obligatorio secundaria, esos serían nuestros principales primeros asistentes a la escuela, siempre respetando los protocolos de distanciamiento social, utilización de barbijo, nosotros garantizando los insumos de higiene”.

“A su vez en cada escuela estamos pidiendo que, en primer lugar, hagan un listado de los docentes que pueden asistir y, en segundo lugar, los docentes que no pueden asistir porque son personas de riesgo o porque son personas que viven en otra localidad y en la otra localidad hay virus. ¿Para qué? Para organizar porque el sistema con el que volveríamos es de bimodalidad, es decir combinaríamos lo presencial con lo no presencial, entonces queremos trabajar con los bloques de integración 2020/2021 o lo que se dé este año 2020, lo queremos hacer interdisciplinariamente con la finalidad de darle prioridad a los contenidos que sí o sí son base para que no omitamos lo que necesitan sacar del nivel, pero al mismo tiempo que incorporemos los contenidos que, si bien no son troncales como matemática, lengua, redacción, interpretación de texto, incorporarle los otros como educación sexual, historia, depende de la orientación, hay distintas cosas de manera transversal, lo que significa que cada escuela tiene que armar su propio proyecto pedagógico y a su vez determinar cómo lo vamos a brindar, es decir qué docentes van a asistir a la escuela y qué docentes van a asistir desde la distancia en la concreción de esos proyectos”, precisó la ministra.

Y continuó: “Eso sería con 5to año, sería a mediados de septiembre, estamos armando los proyectos con cada escuela, siempre en localidades donde no tenemos casos activos de Covid y también en escuelas rurales donde podamos garantizar el distanciamiento”.

En cuanto a los cursos de 5to año de Resistencia, Torrente manifestó que “seguimos con la educación a distancia, pero la idea sería que aunque sea un mes tengamos una presencialidad. Vamos a replanificar nuevamente la forma que bajamos los contenidos, de manera interdisciplinaria, eso será para todos, no sólo para los que regresen a la presencialidad. La idea sería al menos en el mes de octubre tener un contacto con ellos. De lo contrario lo que vamos a tener que hacer, y eso lo vamos a definir también con el ministro de la Nación, es ver cómo analizamos la opción de la escuela de verano y de adelantar un poco el ciclo a esos estudiantes, tenerlos en febrero y marzo en la escuela para luego pasarlos al nivel superior a partir de abril”.

“En principio podemos llegar a hacer una extensión para el año que viene y sobre todo evaluando aquellos casos en los cuales este año no podamos volver. Con los otros años es más simple porque podemos hacer una integración 2020/2021. Es otra prioridad el séptimo grado de la primaria por las mismas razones, el paso de nivel, pero a nosotros nos está generando mucha preocupación y estamos trabajando en ver cómo los vamos a rescatar y traerlos cuanto antes a la escuela a los estudiantes a los cuales hoy no estamos llegando, que no tienen acceso a internet o fueron y buscaron los materiales impresos porque en la provincia repartimos la mitad, los estudiantes están llevando material impreso para trabajar en sus casas pero muchos van, los retiran y luego no hacen la devolución de los materiales con las consignas realizadas o muchos directamente perdieron el contacto con la escuela. Entonces esta semana, en todas las escuelas pedimos que nos hagan un listado con los alumnos con los que no estamos manteniendo continuidad pedagógica y a partir de esta semana se van a procesar esos datos y vamos a tener un diagnóstico de cómo estamos en cada región y para ver qué medidas vamos a tomar”, indicó.

Asimismo, la ministra contó que “a nivel de Nación se está hablando de puentes de igualdad como mecanismo de rescate de esos estudiantes que hoy están asimétricamente tratados por el sistema, en el sentido de que no estamos llegando, y la idea sería rescatarlos, incorporarlos y ver cómo le brindamos la contención social, psicológica y de formación que le brinda la escuela a esos estudiantes. Esos sí son para nosotros un destinatario prioritario y los vamos a hacer retornar en el año de la manera que se pueda, siempre garantizando los protocolos y demás porque nos parece que son donde realmente estamos teniendo la dificultad; es decir, al estudiante que estamos llegando o que hoy, más allá de las dificultades que genera, tiene el acompañamiento de la familia es una realidad y el estudiante que por más que estemos llegando no tiene un acompañamiento de la familia porque los padres no pueden porque están trabajando o porque no entienden las consignas y no lo pueden ayudar o por lo que fuera es una prioridad porque nadie lo está acompañando en este momento, ni los padres ni los docentes ni la escuela ni nadie. Entonces ellos para nosotros van a ser una prioridad ya desde este año y estamos muy enfocados en ver quiénes son, dónde están y cómo los vamos a rescatar. Eso tendríamos más definido para fines de este mes”.

“Hicimos una ronda con todas las asociaciones cooperadoras, sabemos que uno de los principales miedos que tienen es volver este año por eso insisto en que lo vamos a hacer de manera muy responsable y garantizando los protocolos; también trabajamos con una cantidad importante de los directivos, supervisores y demás a nivel de las distintas regiones educativas, abarcamos más o menos 600 personas ahí; hicimos también una reunión con los presidentes de los centros de estudiantes y con los gremios trabajamos es mesas técnicas. Una mesa técnica llamada Normativa discutió en su momento el protocolo y las cuestiones de regreso y ahora les estamos poniendo en consideración la cuestión de integración de ciclos y de todo lo que tiene que ver con la parte pedagógica”, señaló.

En relación con los centros de estudiantes, Torrente precisó que “ellos plantearon varias situaciones en las que manifestaron que tenían un acompañamiento desigual por parte de los docentes. En secundaria, algunos estaban mucho más en contacto y mucho más responsables del proceso y otros no tanto, lo cual es un signo de alerta porque en un año de secundaria vos no tenés un maestro, sino que tenés muchos profesores; entonces es como que estaba muy subordinado a la voluntad del profesor, hasta dónde avanzaba con el grupo”.

“Lo otro que se manifestó bastante recurrente entre ellos fue la falta de llegada hacia ciertos compañeros que ellos sabían que no estaban en los grupos de WhatsApp, por ejemplo, o de redes o de Facebook o de lo que sea que ellos estaban generando y estaban preocupados por ver cómo volvían sus compañeros porque tenían miedo de que se transforme en un éxodo definitivo de la escuela”, sostuvo.

Y agregó: “Ellos toman acciones por sus propios medios para hacerle llegar los materiales a los compañeros que veían que no estaban participando, ver cómo los involucraban… es decir, estaban tomando acciones de manera solidaria para que sus compañeros no se vayan definitivamente de la escuela”.

“La secundaria es un tema central porque nosotros en la escuela pública por ahí no se dan los mismos indicadores que en las privadas y nos pasa que de cada 100 alumnos que ingresan en primer año 50 egresan, entonces tenemos una tasa de desgranamiento muy alta en secundaria”, enfatizó la ministra.

Por último, detalló que “en la escuela hay dos condiciones que te mantienen atado a la escuela: por un lado, las evaluaciones y los informes; y por otro lado la asistencia. Hoy por hoy ninguna de esas dos condiciones está como regla en este momento en nuestros estudiantes. Todo depende de la autonomía, del sentido de responsabilidad que cada uno tiene y del compromiso que tiene con su propio proceso de formación. Es algo parecido a lo que nos pasa cuando el chico va a la universidad. Yo siempre digo que como vengo de la universidad, sé con qué estudiantes nos encontramos en primer año y un proceso de ajuste muy real y concreto que sufren los estudiantes, por lo menos en la Facultad de Ciencias Económicas, donde no todas las materias son obligatorias ni con asistencia obligatoria, es justamente eso: tener que hacerse cargo de que si van a clases es por voluntad, que nadie les pone una inasistencia, que si rinden el parcial o no rinden, de eso depende que aprueben o no la materia, pero no existe el seguimiento día a día que hace el profesor en el colegio”.

“Hoy estamos en una situación parecida y nuestro miedo es que, ante esa situación, aquellos que no se comprometieron con su autoformación después no vuelvan, por eso es como que los queremos ir a buscar, porque la idea es que los chicos egresen, terminen su ciclo, finalicen la secundaria y después decidan qué quieren hacer con su vida pero que terminen y que no siga creciendo la tasa de desgranamiento y que esta pandemia no sea más asimétrica en cuanto a los resultados que genera”, finalizó.

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